“Cuando quieras emprender algo, habrá mucha gente que te dirá que no lo hagas; cuando vean que no pueden detenerte, te dirán cómo tienes que hacerlo; y cuando finalmente vean que lo has logrado, dirán que siempre creyeron en ti”.
John C. Maxwell

En un futuro cercano solo cargaremos nuestro teléfono móvil un vez al año.

Hoy, el principal problema que tienen los smartphones es -dejando de lado la privacidad de nuestros datos- la duración de la batería. Pero se renovó nuestra esperanza y gracias a un descubrimiento hecho por investigadores de la Universidad de Míchigan, puede que dentro de algunos años solo tengamos que cargar nuestros teléfonos móviles  un par de veces al año. Los investigadores crearon un material que podría llevarnos hacia a una nueva generación de dispositivos electrónicos, con mayor capacidad de procesamiento a un costo energético mucho mas bajo. Publicada en la revista científica Nature, la investigación describe un nuevo material, una clase de multiferroico magnetoeléctrico, que las computadoras podrían aprovechar para guardar datos. Creada a partir de múltiples capas, la película resultante es un “emparedado de átomos” que necesita 100 veces menos energía para funcionar que los componentes que se usan hoy en día.  Los dispositivos que usamos hoy precisan de un flujo constante de energía para operar y cuando este se interrumpe se pierden los datos. Con este nuevo multiferroico solo sería necesario enviar un pulso eléctrico cuando interactuamos con los datos almacenados, sin perder los bits al cortar la corriente.  Para técnico Luis Bochatay, especialista en el tema, el mantener cargado el teléfono móvil todo el año  con solo una carga anual,  revolucionara las comunicaciones mundiales.  A pesar de sus beneficios, faltan años para que veamos un dispositivo con esta tecnología a la venta, pero es poco probable que la investigación se detenga ya que múltiples áreas están interesadas en sus resultados. Para los fabricantes significará un gran salto, pero también le dará un respiro al Ambiente al reducir nuestro consumo energético.

Fuente Revista Nature